Alejandro Marcos nos ha escrito unos cuantos consejos para poner títulos a nuestras creaciones literarias. Esto que he traido aquí es un resumen de su artículo en escuela de escritores.com
Buscar un título no es tan sencillo como
puede parecer a primera vista. Necesitamos que el título condense en unas pocas
palabras todo el contenido del texto.
También estaría bien que remitiera o que
sonara al género al que se adscribe la novela e incluso que pudiera dejar
intuir algo del argumento (cero spoilers).
Para los demás, aquí tenéis algunos trucos para encontrar
el título perfecto:
·
Busca una frase en tu texto: Muchas veces queremos buscar fuera
lo que ya está dentro de nuestra novela o de nuestro relato. Lee
algunas partes al azar, extrayendo frases que te gusten especialmente y viendo si tienen alguna
relación con el tema o la trama de la historia. Cuidado con elegir lo primero
que encontréis solo porque suena atractivo. Si no mantiene una relación
estrecha con el tema o el argumento, no habrá razón de ser (y este consejo vale
para todos los demás puntos).
·
Juega con el tema: Extrae
en un folio el tema de la novela, esa idea abstracta que subyace durante todo
el escrito pero que no se debe formular explícitamente. Una vez hecho, intenta
realizar frases que condensen esa idea,
·
Escoge palabras clave: Realiza
un mapa conceptuar con los conceptos que flotan por tu texto. Intenta que sean más de cinco y
coloca esas palabras dispersas en un folio (Intenta ahora unir esas palabras
con líneas. En el centro de la línea escribe una nueva palabra que te haya
sugerido la unión de las dos primeras.
·
Inspírate en otros títulos u otras obras:
·
Intenta buscar nombres totalmente opuestos: Si nada de esto tiene éxito, te
encontrarás en un momento de completa desesperación. Es el momento de
desengrasar y para eso vamos a buscar el antitítulo. ¿Cómo llamarías a tu obra
si fuese totalmente contraria a lo que es?, ¿qué título expresaría peor la idea
de la novela?, ¿con qué palabras quieres que no se relacione la historia? Busca
esas ideas y escríbelas, después intenta torcerlas y darles una vuelta, quizás
hayas encontrado un título de la manera más inesperada.
·
Déjate influenciar: Durante lo que yo llamo «fase
titular» me dedico a escuchar muchas canciones, a ir con los oídos abiertos por
la calle y en el metro, a prestar atención a frases que me dicen mis amigos o
que escucho por la tele, a diálogos en el cine, a carteles, a titulares de
periódicos, etc. Cualquier cosa puede inspirarte, cualquier cosa puede
darte esa pequeña chispa que te guíe hasta el título perfecto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario